Bajó el desempleo y fue de 7% en el primer trimestre

El Indec informó hoy los números de enero, febrero y marzo de este año; la tasa de empleo tuvo su mejor trimestre desde 2016, el inicio de la nueva serie oficial; el empleo en negro creció al 35,9%

En una bandera que la administración de Alberto Fernández puede izar en medio de una dura interna política y de las incertidumbres financieras, el desempleo se redujo más de tres puntos en el primer trimestre del año y fue de 7%, el menor nivel desde 2016, cuando comenzó la nueva serie. Sin embargo, siguen las dudas sobre la calidad del trabajo generado, sobre todo por el salto del trabajo informal, que pasó en los últimos doce meses de 32,4% a 35,9%.

La Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Indec informó esta tarde que el desempleo del período de enero, febrero y marzo (marcado todavía por el impacto de la salida de la pandemia) se mantuvo en el mismo nivel del cierre del año pasado, lo que en el Gobierno consideraron como “un buen número” teniendo en cuenta la estacionalidad laboral.

La cantidad de desocupados, proyectando la población relevada al total del país, fue de 1.503.810, o sea, casi 660.000 menos que un año atrás. La cantidad de personas empleadas creció en 952.000 personas.

En el Ministerio de Economía destacaron que la tasa de actividad fue de 46,5%, un crecimiento 0,2 puntos en la comparación interanual, mientras que la tasa de empleo (43,3%) fue la mejor desde el primer trimestre de 2016 (cuando nació la nueva serie oficial).

En el primer trimestre del año pasado, la desocupación había sido de 10,2%, mientras que la tasa de actividad llegaba a 46,3% y la de empleo marcaba 41,6%. En tanto, al cierre del año pasado, el desempleo estaba en 7%.

El último dato del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), que sólo toma al trabajo registrado, estimaba que en marzo pasado la cantidad total de personas con trabajo en blanco en el país había alcanzado 12,5 millones. Se trató del número absoluto más elevado de la serie oficial. Sin embargo, la creación de trabajo en los últimos años estuvo caracterizada por un muy fuerte avance de los monotributistas y los empleados informales.

Los trabajadores privados registrados -aquellos con trabajo de calidad o descuentos jubilatorios, entre otros derechos- siguen siendo menos que los que había, por caso, en marzo de 2018, antes de la crisis cambiaria en el gobierno de Mauricio Macri. En marzo de este año eran 6.126.000, mientras que en el mismo mes de 2018 llegaban a 6.322.000.

En Economía indicaron que el “empleo está creciendo de ambos lados”, haciendo referencia tanto al trabajo informal como al formal. “El informal viene muy dinámico”, admitieron y agregaron que –más allá de que se prefiere crear empleo formal registrado– “esto es recuperación del empleo y además que suma más ingresos” a la economía. Tanto la subocupación como la subocupación demandante vieron una baja (la primera se redujo de 11,9% a a 10%; la segunda, de 8,7% a a 6,9%).

Sin embargo, los especialistas privados esperan ver si el “ajuste” en el mercado laboral se sigue haciendo por precio más que por cantidad. Ese dilema lo reflejará la evolución de la distribución del ingreso del primer trimestre de este año el miércoles próximo.

La tasa de desocupación más importante en el primer trimestre del año pudo observarse en Gran Córdoba (14,8%). Le siguieron Gran Tucumán-Tafí Viejo (14,4%), Ushuaia-Río Grande (12,3%) y los partidos del Gran Buenos Aires (11,9%). A niveles absolutos, la mayor cantidad de desempleados se mantuvo en este último distrito: fueron 680.000, según el Indec.

La mirada de los analistas

“Se apreció una robusta creación de empleo, y disminución de la desocupación, respecto a un año atrás, cuando la economía todavía estaba afectada por la pandemia”, afirmó Matías De Luca, economista de LCG.

“No obstante, pese a los problemas de estacionalidad que supone la comparación entre trimestres, podemos ver que en el primer trimestre de este año, la tasa de empleo se redujo respecto de finales del año pasado, lo cual fue compensado por una menor tasa de actividad, resultando en una tasa de desempleo invariante”, dijo y cerró: “Las personas que dejaron de estar empleadas directamente pasaron a la inactividad (no buscaron trabajo), por lo que el nivel de desempleo no varió”.

“De cara a fin de año, con un mayor nivel de inflación, es esperable que aumente la tasa de actividad y, por tanto, la tasa de desempleo. Todo en una economía que comienza a estancarse y en la que la escalada de los precios presiona a los hogares para sumar ingresos extras”, pronosticó De Luca.

“Lo que es bien fuerte es el aumento del porcentaje de informales, a 35,9%”, dijo el economista jefe de FIEL, Juan Luis Bour. “Se volvió al nivel más alto. Era de esperar”, señaló y cerró: “Es un indicio de baja demanda de las empresas por un costo unitario que te deja afuera; y de oferta, o sea, de la caída de la calidad educativa”.

“El empleo urbano total creció en 900.000 personas en el primer trimestre respecto a igual trimestre de 2021″, estimó Jorge Colina, de Idesa. “El 80% fueron empleos asalariados no registrados y el 20% fueron empleos asalariados registrados. El cuentapropismo no creció. Esto muestra que sigue creciendo el empleo, pero de la mano de la informalidad. Solo que en algunos trimestres crece el cuentapropismo y en otros, como el actual, el empleo asalariado informal”, completó.

0
0
0
0
0